Que un piso cuente con la correspondiente cédula de habitabilidad es un requerimiento necesario para que esta pueda salir al mercado de alquiler. La presencia de plomo en tuberías y, en consecuencia, en el agua corriente, debido a su toxicidad, podría invitar a pensar que es incompatible con el hecho de obtener la citada cédula. Sin embargo, ¿es así? ¿Puede ponerse en alquiler un inmueble con tuberías de plomo?
- Cómo saber si un piso tiene tuberías de plomo
- ¿Es legal alquilar un piso con tuberías de plomo?
- ¿Cómo saber si el piso en que estoy interesado tiene tuberías de plomo?
- Qué pasa si descubres que tu piso de alquiler tiene tuberías de plomo: cómo reclamar
- Cuánto cuesta eliminar y sustituir unas tuberías de plomo
Cómo saber si un piso tiene tuberías de plomo
La respuesta más evidente es recurrir a un profesional (fontanero) para que verifique mediante un kit de detección el tipo de tuberías que se tienen instaladas en la vivienda. No obstante, algunos de esos citados kits de laboratorio se venden en ferreterías y tiendas especializadas y pueden ser utilizados de forma sencilla por cualquier usuario.
Entre ellos, destacan las tiras reactivas que, al contacto con el agua corriente, son capaces de cambiar de color en función de que exista o no presencia de metales pesados diluidos en ellas.
Del mismo modo, existen una ser de pruebas caseras que se pueden realizar de manera sencilla a modo de valoración previa, ya que, si todas resultan negativas, casi con total seguridad el piso estará exento de plomo y se podrán ahorrar los test especializados, que siempre suponen un desembolso mayor.
Entre ellas, destacan las siguientes:
- Color. Las tuberías de plomo suelen tener un aspecto grisáceo que las hace fáciles de identificar. Lamentablemente, tenemos que admitir que este rasgo puede es menos evidente si las tuberías han estado en uso durante mucho tiempo.
- Marcas de soldadura. A diferencia de lo que ocurre con las de PVC o acero, las tuberías de plomo se unen mediante soldadura, cuyas marcas resultan visibles en las uniones y derivaciones.
- Dureza. El plomo es un metal blando y maleable, que se deforma fácilmente al realizar presión sobre él. Si puede rayar la superficie de la tubería, es probable que sea plomo.
- Forma. Las tuberías de plomo suelen tener una forma cilíndrica clásica.
¿Es legal alquilar un piso con tuberías de plomo?
Evidentemente, no. Aunque la ley no se pronuncia explícitamente al respecto (por lo tanto, no podría considerarse una vivienda ilegal), la respuesta es lógica: si, como decimos, el plomo en agua es un material tóxico y nocivo para la salud de las personas, si se es consciente de que las tuberías de un piso están ejecutadas con él, bajo ningún concepto podrá alquilarse o venderse.
Pensemos que el propio artículo 20 del el Real Decreto 140/2003 de 7 de febrero prohíbe de forma explícita la presencia de plomo en aguas suministradas a través de una red de distribución pública o privada.
Artículo 20 – Control en el grifo del consumidor
1. Para las aguas de consumo humano suministradas a través de una red de distribución pública o privada, el municipio, o en su defecto otra entidad de ámbito local, tomará las medidas necesarias para garantizar la realización del control de la calidad del agua en el grifo del consumidor y la elaboración periódica de un informe sobre los resultados obtenidos.
2. Los parámetros a controlar en el grifo del consumidor son, al menos:
[…]
j) Cobre, cromo, níquel, hierro, plomo u otro parámetro: Cuando se sospeche que la instalación interior tiene este tipo de material instalado.
Por lo tanto, siguiendo las disposiciones legales mencionadas, en toda vivienda que las pueda tener, será necesario llevar a cabo la renovación de las tuberías de plomo. Por supuesto, los gastos asociados será siempre a cuenta de los propietarios del inmueble.
En el caso de que las tuberías estuvieran ubicadas en las instalaciones colectivas de un edificio de viviendas, el arreglo corresponderá a todos los vecinos por igual, por lo que la lógica invita a pensar que la Comunidad de Propietarios debería actuar de forma conjunta; así, es posible que se pudieran conseguir ayudas públicas (autonómicas, casi siempre) que sufraguen parte o la totalidad de las obras.
Por último, si se trata de una vivienda arrendada, como decimos, la obligación de cambiar las conducciones recae en el propietario, o sea, en el casero, así lo establece el artículo 21 de la LAU, ya que, en este caso, la sustitución se consideraría una obra de conservación del inmueble.
1. El arrendador está obligado a realizar, sin derecho a elevar por ello la renta, todas las reparaciones que sean necesarias para conservar la vivienda en las condiciones de habitabilidad para servir al uso convenido, salvo cuando el deterioro de cuya reparación se trate sea imputable al arrendatario a tenor de lo dispuesto en los artículos 1.563 y 1.564 del Código Civil
¿Cómo saber si el piso en que estoy interesado tiene tuberías de plomo?
En este sentido, por suerte para todas las personas que residen de alquiler, la nueva Ley por el derecho a la vivienda ha incluido un apartado relativo a las posibles sustancias y materiales actualmente considerados peligrosos o nocivos para la salud, pero que en el pasado eran perfectamente legales. Concretamente en el artículo 31 (Información mínima en las operaciones de compra y arrendamiento de vivienda), se atribuye al interesado en la compra o arrendamiento de un inmueble la posibilidad de solicitar al propietario actual toda la información que se pueda tener acerca de la presencia de, entre otros, de plomo en las tuberías del mismo.
[…]
2. En los mismos términos de lo establecido en el apartado anterior, la persona interesada en la compra o arrendamiento de una vivienda podrá requerir información acerca de la detección de amianto u otras sustancias peligrosas o nocivas para la salud.
Por lo tanto, en caso de duda (porque el piso sea relativamente antiguo), lo razonable será plantear esta cuestión al casero o vendedor. Eso sí, dado que la ley es reciente aún, no existe jurisprudencia suficiente sobre cómo se ha de proceder una vez se inicia la petición. Del mismo modo, tampoco está claro hasta dónde debe llegar esa obligación de transmitir información sobre el tipo de tuberías que se tienen instaladas; es decir, si simplemente basta con notificar que no se conoce o si, en tal caso, se ha de contratar a un profesional para que lo verifique.
Qué pasa si descubres que tu piso de alquiler tiene tuberías de plomo: cómo reclamar
Como acabamos de indicar, si se sospecha que el piso en el que se reside tiene tuberías de plomo en sus instalaciones, el primer paso será poner en conocimiento del casero esta situación. Para hacerlo, como siempre, se recomienda utilizar un medio de contacto con acuse de recibo: email, burofax o carta certificada. Es importante que, en este escrito, se le pida a la propiedad que realice las pruebas pertinentes (en caso de haberlas realizado ya el arrendatario, se pueden incluir los resultados).
Del mismo modo, conviene instar, en el mismo escrito, a que la otra parte verifique, si así lo estima, la situación y que, en cualquier caso, realice los arreglos a los que está obligado legalmente.
Lo normal será que el arrendador sea sensato, compruebe el material con el que están ejecutadas las canalizaciones y, en caso de efectivamente ser de plomo, iniciar el proceso de sustitución. Si, por el contrario, este modo sensato de actuar no se lleva a efecto, procederá denunciar e iniciar un proceso judicial.
Cuánto cuesta eliminar y sustituir unas tuberías de plomo
Evidentemente, el precio dependerá de muchos factores, entre los que destacan la superficie de la vivienda, el número de tomas de agua que existan en ella y el tipo de tubería que se quieran instalar en sustitución. Aun así, podemos decir que, para una casa de dos baños y cocina con tuberías de plomo, el cambio integral de la instalación por conducciones de PVC costará alrededor de 3.500 € ó 4.000 €.