Encontrar un piso de alquiler barato y que no tenga trampa oculta, no es fácil. El miedo a una posible estafa o a que las cosas no sean tan felices como las pinta el anuncio o el agente inmobiliario siempre está ahí. Por eso, es imprescindible que, en la primera visita, el futuro inquilino resuelva todas las dudas que pueda tener y que, a la larga, puedan ser fuente de conflictos. A continuación te dejamos el listado de preguntas que no debes dejar de hacer a tu futuro arrendador antes de firmar un contrato de alquiler.
- Cómo es el barrio y el vecindario
- ¿Larga o corta duración?
- Condiciones en caso de rescindir el contrato de manera anticipada
- Período exacto de cumplimiento de contrato obligatorio
- ¿Existe la posibilidad de alquiler con opción a compra?
- ¿Está permitido subarrendar la vivienda de forma legal?
- Cómo se actualizará la renta, ¿IPC u otro método?
- Importe de la fianza
- Depósito y avalista, ¿son necesarios?
- Gastos de mediación de la agencia
- Qué incluye la renta de alquiler
- Tamaño en metros cuadrados útiles
- ¿Están los suministros dados de alta?
- ¿Están los suministros al corriente de pago?
- Importes aproximados de los suministros mensuales
- Orientación de la vivienda
- Internet, ¿qué tipo de conexión tiene instalada el edificio?
- Si existe un seguro de la vivienda, quién debe abonarlo
- Quién paga el IBI
- Piso sin ascensor, ¿está en los planes de la comunidad de vecinos?
- ¿La vivienda se entrega recién pintada?
- Fecha de la última reforma
- Desperfectos y humedades
- Obras en la vivienda, ¿se pueden realizar?
- Agujeros en paredes, ¿qué pasa con los baños y cocina?
- ¿Se pueden pintar paredes y techos?
- Animales y mascotas
- Fumar, ¿se puede?
- Mobiliario, ¿en qué condiciones está? ¿Se puede cambiar?
- Menaje
Cómo es el barrio y el vecindario
Si eres una persona tranquila, un opositor o un estudiante de posgrado, por ejemplo, buscarás que tus vecinos sean tan silenciosos y discretos como tú. Si tu situación es justo la contraria, es decir, si lo que te gusta es una comunidad en la que se fomente la interacción de los inquilinos o, por ejemplo, inviertes gran parte de tu tiempo en tocar un instrumento, necesitarás tener claro que el edificio al que vas a vivir es compatible con tus intereses y hábitos. No tener este punto claro desde el principio puede llevar a generar un convivencia conflictiva que no interesa a nadie en el vecindario.
¿Larga o corta duración?
Sin duda, un punto esencial. Hay personas que necesitan tener estabilidad en sus rutinas y, sobre todo, en su hogar. Hombre y mujeres que no quieren mudarse cada tres años de vivienda porque, entonces, no sienten que la casa en la que residen es su casa. Si esta es tu situación, no debes nunca mudarte a un piso en el que solo se contemple el alquiler de temporada.
Condiciones en caso de rescindir el contrato de manera anticipada
Aunque la mayoría de las situaciones por las que se puede rescindir o desistir de un contrato están recogidas en la Ley de Arrendamientos Urbanos, conviene que ambas partes tengan claro qué motivos pueden llevar a la resolución final del arrendamiento para que no haya sorpresas y, sobre todo, conflictos no deseados.
Período exacto de cumplimiento de contrato obligatorio
La LAU establece que la duración de los contratos puede ser libremente acordada por las partes. Por ello, es vital que, en la primera visita, se aclare este punto. Del mismo modo, hay que recordar que el inquilino, en principio, sólo podrá desistir del contrato una vez cumplidos los 6 primeros meses de vigencia del mismo.
¿Existe la posibilidad de alquiler con opción a compra?
El alquiler con opción a compra es una alternativa interesante para aquellos arrendatarios que, en un futuro, tienen claro que van a adquirir un inmueble en propiedad. Si este es tu caso, no debes olvidar plantear esta cuestión al propietario, entre otras cosas porque, de ser así, hay que realizar el abono de una prima que debes contemplar como gasto inicial.
¿Está permitido subarrendar la vivienda de forma legal?
Subarrendar o alquilar parte de la vivienda mientras se sigue residiendo en ella está contemplado por la LAU solo en el caso de que se tenga el consentimiento expreso del propietario. Si, por ejemplo, vas a ser arrendatario una casa con más habitaciones de las que necesitas pensando en darle salida mediante alquileres temporales o permanentes, es urgente que tengas claro si tu casero acepta o no este tipo de cesiones en su propiedad.
Cómo se actualizará la renta, ¿IPC u otro método?
Legalmente, la subida de la renta de la vivienda se llevará a cabo según los criterios que la partes hayan acordado, no pudiendo ser nunca mayor al IPC del año previo. Aunque lo habitual es usar siempre el criterio del Índice de Precios de Consumo algunos caseros prefieren establecer un porcentaje de interés fijo registrado en el contrato; por lo tanto, de nuevo, se trata de un punto a resolver.
Importe de la fianza
En teoría, la fianza de que nos puede pedir no puede superar el importe de una mensualidad completa y, además, ha de ser depositada en las oficinas correspondientes de la Comunidad Autónoma. Sin embargo, hay caseros que piden un importe mayor (muchas veces confunden fianza con depósito), por lo que es interesante saber cuánto nos piden y, sobre todo, qué finalidad van a darle a ese importe que se entrega en metálico.
Depósito y avalista, ¿son necesarios?
Tanto el abono de un depósito como la firma de un avalista son garantías que algunos propietarios solicitan a fin de tener la certeza de que su inquilino es una persona solvente o con herramientas suficientes para afrontar los pagos. Será necesario, por tanto, ver si el casero concreto de la vivienda que nos interesa los exige como condición o no.
Gastos de mediación de la agencia
Por norma general, los gastos de agencia se repercuten sobre el arrendatario y suelen corresponderse con una mensualidad, pero es un asunto que, obviamente, hay que esclarecer. Y, muy importante, es necesario informarse sobre si el precio de la mensualidad lleva incluido el IVA correspondiente o hay que aplicárselo después.
Qué incluye la renta de alquiler
Hay determinados pisos en los que la mensualidad solo cobre la vivienda. Otros incluyen los gastos de comunidad. Los hay que, incluso, cubren algunos suministros como el agua o Internet. Será este un punto necesario a aclarar, ya que, de estar algún suministro contemplado por la renta, quizá se pueda aspirar a alquilar una vivienda con una importe mensual mayor.
Tamaño en metros cuadrados útiles
Saber cuánto mide una vivienda nos permite organizarla y empezar a plantear su distribución. Aunque se trata de un dato que suele venir reflejado en los anuncios de los portales web, no siempre está contrastado. No es maña idea, si nos preocupa especialmente este punto, preguntar a nuestro casero si nos podría facilitar una nota simple en la que se reflejen cuántos metros cuadrados tiene la vivienda.
¿Están los suministros dados de alta?
De nuevo, un punto esencial, ya que dar de alta algunos suministros supone un desembolso considerable de dinero. De ser necesario llevar a cabo la gestión, hemos de aclarar quién asumirá los costes, ¿el arrendador o el arrendatario?
¿Están los suministros al corriente de pago?
Nadie quiere pagar por aquello que no le corresponde, por lo que conviene garantizar que el antiguo inquilino (o el propietario) han abonado todas las facturas pendientes de la vivienda.
Importes aproximados de los suministros mensuales
No todas las ciudades y no todos los barrios tienen los mismos importes asociados a un gasto medio de luz, agua y gas, por ejemplo. Es conveniente consultar al propietario cuál es el gasto aproximado de suministros que tiene la vivienda para, así, poder calcular el presupuesto mensual que supondrá vivir en ella.
Orientación de la vivienda
Una vivienda bien orientada reduce sensiblemente el gasto de calefacción y climatización. Si las paredes están enfrentadas buscando norte y sur, la ventilación cruzada será posible y conseguiremos obtener un ahorro considerable mes a mes en nuestros suministros.
Internet, ¿qué tipo de conexión tiene instalada el edificio?
Especialmente en los bloques insertos en el casco antiguo de las ciudades o en aquellos que se construyeron hace varias décadas, no siempre es posible contar con una conexión de datos veloz (fibra), de manera que nos tenemos que conformar con otras más lentas, viejas y caras (cable coaxial). Es posible que si teletrabajas, este punto sea de vital importancia para ti.
Si existe un seguro de la vivienda, quién debe abonarlo
Dado que no se trata de un gasto imprescindible en la vivienda, es necesario aclarar con el propietario quién debe asumir los gastos de un seguro de vivienda (o de incendios, si lo hay) y si, en el caso de no querer el servicio, lo podemos dar de baja.
Quién paga el IBI
Por norma general, el pago del IBI recae sobre el arrendador. Sin embargo, es posible llegar a acuerdos (que han de quedar firmados) en los que el inquilino asuma parte o la totalidad del abono del impuesto. Por tanto, no hay que dar por hecho ninguna situación si se quieren evitar gastos no previstos.
Piso sin ascensor, ¿está en los planes de la comunidad de vecinos?
Es posible que la vivienda se encuentre en un bloque que carezca de ascensor. Esto siempre será un contratiempo, aunque puede ser menor en el caso de que haya intención de instalar uno. Ojo, este punto es importante en el caso de que el pago de la comunidad lo realice el inquilino ya que, con la incorporación del ascensor, puede que la mensualidad también suba.
¿La vivienda se entrega recién pintada?
Se supone que una vivienda ha de entregarse en perfectas condiciones, pero no siempre ocurre. Muchas veces los propietarios, en su interés por no tener el inmueble vacío, lo enseñan a futuros inquilinos justo cuando el anterior arrendatario lo ha abandonado. Debemos asegurarnos de si se entregará en ese estado o si, por el contrario le darán un «lavado de cara». De ser negativa la respuesta, podemos usarla como argumento para conseguir una rebaja en la renta.
Fecha de la última reforma
Puede parecer un tema menor, pero no lo es. Saber la fecha en la que un propietario ha reformado su vivienda, te dará una idea sobre el grado de cuidado que pone sobre ella y, muy seguramente, te indique cómo de riguroso puede ser a la hora de valorar el estado en que se deja cuando la abandonamos (con las consecuentes implicaciones económicas sobre la fianza).
Desperfectos y humedades
Localiza todas las irregularidades que estimes convenientes en la primera visita e inquiere a tu propietario sobre ellas. Es importante que quede constancia sobre el estado inicial de la vivienda y sobre la disposición del propietario a hacer mejoras.
Obras en la vivienda, ¿se pueden realizar?
Por norma general, las obras que un inquilino puede realizar en una vivienda deben contar con el consentimiento expreso del propietario. Si nuestra intención es modificar la distribución del inmueble, debemos saber cómo de proclive es el arrendador a esta modificación. No hacerlo puede suponer serios problemas en el futuro, incluidos, llegado el caso, litigios legales.
Agujeros en paredes, ¿qué pasa con los baños y cocina?
Por norma general, en los contratos de arrendamiento se prohíbe realizar agujeros en los paramentos. La razón de ser de esta restricción tiene que ver, habitualmente, con el hecho de no romper los azulejos de cocinas y baños, ya que en ellos un orificio tiene difícil restitución. Es importante saber si, como norma general, se pueden o no taladrar paredes o si existe un criterio distinto para los cuartos húmedos y para el resto de la vivienda.
¿Se pueden pintar paredes y techos?
Pintar una pared, de alguna manera, se considera una obra menor, por lo que debe tener el consentimiento del propietario. Si se trata de pintar en el mismo color, no debe haber problemas; pero, si la intención es cambiar la tonalidad, si será necesario saber a priori si el dueño está o no por la labor de darnos permiso.
Animales y mascotas
Sin duda, uno de los temas más conflictivos en los arrendamientos. Perros y gatos suelen no estar bien vistos por parte de los propietarios que entienden que los desperfectos en sus pisos serán mayores si hay animales de por medio. Por tanto, si eres una persona con mascotas o crees que en el futuro podría compartir tu vida y casa con un animal, es necesario que te asegures de que tu propietario no vea esto como un motivo para rescindir el contrato.
Fumar, ¿se puede?
Un arrendador puede prohibir a sus arrendatarios fumar en la vivienda. Por lo tanto, es un tema a aclarar, seamos o no fumadores, pensando en las posibles visitas que se puedan tener en el futuro. Del mismo modo, en el caso de que no se permita fumar en el inmueble, conviene saber si la restricción de aplicará a toda la vivienda o sólo a determinadas estancias.
Mobiliario, ¿en qué condiciones está? ¿Se puede cambiar?
En el caso de las viviendas amuebladas, puede que el gusto del propietario no sea próximo al del arrendatario. O que algunos muebles estén en mal estado. O que nos sobre una cama del segundo dormitorio que queremos destinar a despacho o cuarto de estudio. Todas estas cuestiones y posibles cambios en el mobiliario de base han de ser aclaradas.
Menaje
De manera similar al mobiliario ocurre con el menaje. Ollas, platos, copas, vasos, batidoras o exprimidores, por ejemplo, ¿están incluidos en el alquiler o ha de aportarlos el inquilino?